Las ruinas
“..todos queremos que
las cosas permanezcan igual aceptando vivir en la aflicción porque le tenemos
miedo al cambio, a que todo termine en ruinas. Luego, vi alrededor del lugar, el caos que había
permanecido y la forma en la que se ha adaptado al ser quemado, saqueado y luego construido
una vez más, y me sentí tranquila.
Tal vez mi vida no ha
sido tan caótica, el mundo es el caótico y la verdadera trampa es atarse
emocionalmente al caos. Las ruinas son un regalo, las ruinas son el camino a la
transformación”
Comer, rezar, amar
Tarea para el fin de semana: provocar el cambio (y esta vez es de verdad).
Bueno.
ResponderEliminarEstá bien pensado.
Un abrazo.
Gracias.Besi!
EliminarSepulturero, es hermoso contemplar las ruinas de las ciudades, pero es más hermoso todavía contemplar las ruinas de los hombres.
ResponderEliminarConde de Lautréamont
muy bueno, me lo apinto, gracias Pitt!
EliminarPuede que algunas cosas permanezcan intactas, pero no nosotros, los pensamientos estan vivos y por lo tanto mutan. Abrazos
ResponderEliminarY esa es la verdadera esencia del ser humano: la mutabilidad.
EliminarBesos, Ester.
¿No me digas que tú también me vas a poner tareas para el finde?
ResponderEliminarYo cambio todos los días ¿es te sirve?
jajaja, no hagas las tareas, tú ya las tienes hechas
EliminarAunque no nos demos cuenta, la vida es un cambio constante. Cuando ponemos consciencia en realizar un cambio, entonces vemos los progresos en lo más sencillo. Un abrazo
ResponderEliminarY todos los cambios son siempre para mejor.
EliminarBesos Ana
Muy interesante ...
ResponderEliminarGracias, Mark.
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