Aqui y ahora.
“ Cuenta una leyenda universal que, hace muchas épocas, las personas eran animales simbióticos: iban siempre acompañadas de un pájaro diminuto, de plumaje brillante y canto melódico y como un susurro. Se llamaba Ahora. Los Ahoras acompañaban a los humanos día y noche, revoloteando por sus cabezas en silencio, y eran pajaritos muy sabios y sencillos. Cada vez que sus simbiontes contemplaban un paisaje hermoso, miraban a alguien a los ojos, o vivían cualquiera de esos mágicos eventos que suelen discriminarse solo por ser cotidianos, el Ahora les daba un pequeño picotazo en la cabeza y cantaba; entonces las personas tenían un Momento de Consciencia. Vivían el presente con más nitidez y eran felices. De hecho, los Ahoras se alimentaban de las emociones que se desprendían de estos momentos, y de ahí la simbiosis. Había gente que se hacía muy amiga de sus Ahoras y estos les daban Momentos de Consciencia a cada instante. Sin embargo, algo ocurrió. Llegó un punto en que, por motivos sini