Septiembre

El mes de septiembre huele a lápices recién afilados, a libros, a gomas de borrar, a asignaturas pendientes,  a miles de propósitos que no se van a cumplir,  a lejanías, a cenizas y a esperanzas.
Miro en mi interior y no veo lo de siempre, es como si hubiera soltado lastre, como si la experiencia de todo lo negativo se hubiera quedado en nada.
He dejado de sufrir por tonterías, he dejado de machacarme, he dejado de lado las negatividades, las desesperanzas y los errores.
Si me equivoqué, fue parte de un aprendizaje, ya no me martirizo, al fin y al cabo eso del "castigo" es uno de esos ridículos pesos impuestos por una educación judeo-cristiana y por una sociedad castrante.
Todos los años, hago una especie de catársis para espantar fantasmas y enfrentar el otoño desde una perspectiva de paz y armonía, y creo que estoy lista para vivir lo que tenga que venir.
Durante mucho tiempo, he sido feliz, sí, pero faltaba algo para equilibrar la balanza, hoy veo que en realidad, sólo faltaba que yo fuera consciente de mi propia fuerza y de mi potencial, sólo me faltaba saberlo.
Así que, después de un verano sublime, vuelvo a la rutina con una dosis extra de energía.

Comentarios

  1. La sabiduria vieneasi de a poquito a medida que nuestro ser espiritual avanza e el conocimiento del positivismo y de que solo nosotros somos responsables denuestro dia a dia.

    Feliz energia que la Luz te la mantenga apara tu propia felicidad

    Cariños

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  2. A veces tenemos la sensación de que falta algo para completar nuestra felicidad, que bonito cuando tomas conciencia de que en ti estaba la respuesta. Que la energía extra te acompañe todos los días.
    Abrazos.

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