Frikismos

Juro que no entiendo a la raza humana.

No entiendo a esta panda de mamarrachos en que nos estamos convirtiendo: hablamos de ansiedad, de miedos, de fobias, pero es que nos generamos solitos los agobios,  estreses y chorradas varias.

Nos alimentamos de semillas de amapolas y de mejunjes verdes, nos hipotecamos la vida comprando una casa que van a terminar de pagar nuestros nietos, nos empeñamos en parecer felices, nos resistimos a que pasen los años, nos machacamos física y emocionalmente para enseñarle al mundo nuestra mejor cara, y estamos perdiendo la verdadera esencia del ser humano.

Nunca he prestado atención ni las maravillas de la tecnología, ni a las novedades del mundo estoyadietacorromuchoymequieromorir.

Pero veo a la gente que lleva los relojes estos que reciben los correos, whatsApps y llamadas y me pregunto ¿qué clase de zumbao (mi frikicuñao para mi hermana), se gasta un pastizal en llevar en la muñeca básicamente lo mismo que llevas en el bolso?

Vamos a ver, la cosa es que recibes el mail, en la tablet que llevas en el maletín, en el móvil que llevas en el bolso y en el reloj, ¿no?

O sea que, lo de “uppps no he visto tu mail”, ya ni de coña, porque si no lo has visto es que eres tonta por gastarte medio sueldo en esas bobadas y un poco más, por no hacer uso de ellas.

Y digo yo;  ¿qué necesidad? ¿Para qué queréis estar localizadas siempre?, ¿es que no os apetece tirarlo todo y perderos en un bosque o algo?. Esto es una forma de esclavitud, estoy de acuerdo en el hecho de que la ciencia avance, pero para ayudar, no para martirizar y a mi esto, me parece una auténtica tortura.

Luego está la pulserita esa que te mide el pulso, te cuenta las calorías, los pasos que das, lo metros recorridos  y te provoca un microinfarto cuando ves que después de 5 km de marcha, nos has bajao la hamburguesa. No lo entiendo, de verdad que no lo entiendo, ¿de qué sirve saber lo andas, las calorías que bajas y la tensión que tienes?
Que sí, que somos muy sanos, y puede hasta con esto de cuidarse tanto aumente la esperanza de vida, pero ¡esta la vida que queremos tener? si  llegas a casa y nos has hechos los kms que había que hacer, ¡que haces, les das tres o cuatro vueltas al pasillo?, ¿no nos están encadenando uno poco todas estas maravillastecnológicas?

Pienso, de verdad que estas cosas nada más que sirven para aumentar los niveles de estrés, para que nos pongamos metas que no cumpliremos jamás,  para cargarnos con más responsabilidades y para hacernos un poquito más infelices.

Debo ser una cateta integral, pero me niego a que la frikitecnología me robe la vida.